(CHEME).- Los robos y asaltos a plena luz del día y en cualquier lugar del centro comercial de Huaquillas sacuden a pobladores tanto comerciales como residenciales del cantón fronterizo. Ayer, simultáneamente, hubo tres atracos sin que testigos de los hechos puedan prestar ayuda por la violencia de los delincuentes.
(CHEME).- Los robos y asaltos a plena luz del día y en cualquier lugar del centro comercial de Huaquillas sacuden a pobladores tanto comerciales como residenciales del cantón fronterizo. Ayer, simultáneamente, hubo tres atracos sin que testigos de los hechos puedan prestar ayuda por la violencia de los delincuentes.
Rosa Esther M. J., de 70 años, siendo las 04h30 del miércoles, cuando se disponía a viajar a la ciudad de Pasaje, en uno de los buses de transporte de pasajeros CIFA, dado que tenía cita médica con el cardiólogo en el Hospital Militar de Pasaje, fue atacada por dos delincuentes.
Explicó que ellos llegaron a bordo de una motocicleta, quienes le arrebataron la cartera y la arrastraron unos tres metros, sin lograr el objetivo, pues personas que se encontraban en el sector impidieron el robo y salieron en defensa de la malograda ciudadana.
Inmediatamente Rosa fue trasladada hasta la sala de emergencia del hospital Básico de Huaquillas, porque presentaba dolor de cabeza, dolor en la clavícula, en la cadera y contusiones en brazos y piernas.
Su hijo Marcos expresó que los delincuentes están plenamente identificados y en las próximas horas las autoridades policiales procederán a realizar un operativo para dar con el paradero de los facinerosos.
No obstante minutos después, un ciudadano peruano fue golpeado y despojado de un pasaporte y 300 dólares, pero está vez la gente no pudo hacer nada porque los delincuentes sacaron a relucir armas de fuego con la intención de disparar a quien se interponía.
Horas más tarde, en la afueras del Hospital Básico Huaquillas, cuando pretendía ingresar a tomar su turno, dos delincuentes proceden a quitarle la cartera no sin antes apuntarla con un arma de fuego que asustó a la empleada pública, quien llegó a la sala de emergencia en estado de shock. Personal médico de turno la atendió para luego derivarla hasta su domicilio.
Alexandra A. Nunca se imaginó que fuera sorprendida por algún delincuente, por cuanto cada vez que llegaba al Hospital tomaba precauciones inclusive al salir de su domicilio.