Mascarilla N95, la que generó polémica por su precio para la adquisición.
QUITO.- Ante la información difundida en redes sociales y medios de comunicación relacionados a los procesos de contratación de insumos por la emergencia sanitaria del COVID-19 por parte del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), la Superintendencia de Control del Poder de Mercados (SCPM) reitera que se mantendrá vigilante para preservar la competencia en los procesos de compras públicas que realicen las entidades del Estado.
El presidente del IESS, Paúl Granda, junto con el secretario Anticorrupción, José de la Gasca, informaron el sábado la suspensión de la orden de compra de insumos médicos en el IESS para la crisis sanitaria. Esto, frente a las denuncias de presuntos sobreprecios que se generaron a través de redes sociales en varios insumos como las mascarillas N95 que el Seguro Social adjudicó a un precio $ 12 por unidad cuando en el mercado local se ofertan a $ 3,90.
“Los fabricantes, proveedores y comercializadores no pueden aprovechar la emergencia para aumentar sus márgenes de ganancia mediante la extracción injustificada del excedente del consumidor o el perjuicio a los recursos del Estado”, informa la SCPM en redes sociales.
La SCPM, de acuerdo con las atribuciones concedidas en la Ley Orgánica de Regulación y Control del Poder de Mercado, no tiene la facultad de controlar precios; sin embargo, informa que se encuentra monitoreando la situación para derivar las denuncias a los organismos correspondientes y, de encontrar indicios de prácticas anticompetitivas, actuará conforme a la ley.
Agrega que esta superintendencia “impondrá sanciones en los casos que se presenten conductas anticompetitivas y reitera que, los recursos públicos, que son patrimonio del pueblo ecuatoriano, deben ser, hoy más que nunca, utilizados con pulcritud y eficiencia”.
Esto lo señala en un exhorto dirigido a los fabricantes, proveedores y comercializadores, a las instituciones públicas, organismo de control y ciudadanía en general.