Habemus segunda vuelta! ¡Bien por nuestro país! Era necesario tener la oportunidad de elegir sin que exista la peligrosa permanencia imprescriptible en el poder, porque esta corrompe.
Ahora la campaña electoral de esta segunda vuelta se focalizará entre dos fuerzas políticas, donde el electorado tendrá más clara su elección en vista que no lo distraerán tantos colores, promesas, bailes y nombres de ese gran número de candidatos que corrieron en esta pasada primera vuelta.
Habemus segunda vuelta! ¡Bien por nuestro país! Era necesario tener la oportunidad de elegir sin que exista la peligrosa permanencia imprescriptible en el poder, porque esta corrompe.
Ahora la campaña electoral de esta segunda vuelta se focalizará entre dos fuerzas políticas, donde el electorado tendrá más clara su elección en vista que no lo distraerán tantos colores, promesas, bailes y nombres de ese gran número de candidatos que corrieron en esta pasada primera vuelta. Lo que con seguridad ocurrirá será la polarización de las fuerzas electorales, en las que todos los que de una u otra manera no estaban de acuerdo con las políticas del actual gobierno se unirán para apoyar, ahora sí, al único candidato de la oposición.
Los verde flex la tienen muy complicada, porque están heridos de muerte. Todas las denuncias de corrupción, donde varios personajes de todo nivel jerárquico de este gobierno han estado involucrados, los golpeó contundentemente. Esto sin contar con el desgaste natural que han sufrido con el paso del tiempo porque no olvidemos que han estado dirigiendo el país durante 11 años ininterrumpidos.
Ya con poco dinero y sobreendeudados, debido a la mala administración de nuestros recursos, que rematados con la falta de incentivo para el desarrollo de la empresa privada, los tiene prácticamente imposibilitados de continuar con el despilfarro inmisericorde del que hicieron alarde durante estos años de administración verde flex. Ahora, veremos cómo se manejan en este ambiente electoral al que no han estado acostumbrados, donde ya no son los favoritos y que por desesperación ¡quién sabe, de lo que serán capaces de hacer!
Quien debe estar más relajado, es el candidato presidencial del partido oficialista porque él sabe perfectamente lo difícil que será ejercer la primera magistratura del país con un vicepresidente de pronóstico reservado, sin olvidarnos del concepto bastante particular que tenía el Dr. José María Velasco Ibarra sobre quien ejercía ese cargo.
Reflexionemos nuestro voto, para escoger la mejor opción para nuestro querido país.